Perdonen la ordinariez del título, pero verán, criado en los 80, hombre tosco soy, y que de gracias ese desgraciado de pajota jota abrams de no tenerme delante porque a lo mejor tendría para el más que palabras después de lo que ha hecho con la saga tan vieja como yo y que ha sido mi compañera fiel toda mi vida. Ya desate toda mi ira en una entrada anterior tras ver la desfachatez de película que éste sujeto había realizado por lo que no lo mentaré más, pensé que la saga había muerto para mi victima de fanservice barato para paletos y su familia palpatine sacada de su pestilente ojete, que resultó para mi la mayor ofensa que había visto hacia el universo star wars desde ese abobinable juego de kinect en donde dicho emperador no solo estaba vivo, sino que se marcaba unos bailoteos que mas quisiera yo dar a mis años, pero ironias de la vida, con el mandalorian descubrí... una nueva esperanza.
Boba fett es todo un éxito de márketing, como un personaje que solo tiene un par de líneas en la triología original se convirtió en alguien tán fascinante solo es explicado por la magia del universo star wars, y los responsables de la saga siempre lo han sabido. Nunca faltó merchandising del carismático recompensas que se llevaba de paseo a han solo con su traje de carbonita, ni de su peculiar nave, incluso apareció en la segunda triología de precuelas de niño junto a su papa y hermanitos clon. Por eso, cuando escuché que harían una serie sobre un mandaloriano, raza, o mejor, credo al que pertenecía dicho personaje, no me sorprendió en absoluto.
No es que tuviera unas espectativas muy buenas viendo la trayectoria de los últimos productos relacionados con la saga desde que disney puso sus zarpas en ella, no me gustó rouge one salvo los gloriosos últimos minutos con darth vader, la peli de han solo debería de haber sido una serie, porque la mayoría del metraje te lo pasas comparándolo con harrison ford, y el episodio 9...dejemoslo ahí. Pero quiem me iba a decir que solo bastó un episodio para transmitirme más emociones propias de la saga que todos los largometrajes más cercanos en el tiempo.
Para empezar, vuelve el universo oscuro y sucio de la triología original, tan distante a las precuelas sobrecargadas de cgi que tan mal ha envejecido y sus romances ñoños con cero química, y es mil veces más respetuoso con el fanservice que la última triología, que te lo lanza a la cara con todo el descaro de tal forma que incluso lo hace a expensas de la coherencia de su propio universo como pasa en la cagada de pajota abrams 9.
Aquí verás elementos que se han visto en la saga star wars original, vehiculos, localizaciones, pero siempre usando ese universo como un escenario en donde los protagonistas actuan, no como un escaparate para que los fans mas paletos vean lo mismo de siempre.... QUE SE MUERA LO VIEJO...la mejor frase del incomprendido kylo ren y de su director rian johnson, que por lo menos tuvo los cojones de traer algo fresco y nuevo a esa saga en que sus fans mas paletos tienen como reliquia mohosa. Aquí en la serie por fortuna traen algo fresco aún respetando el legado de la saga, y sinceramente, han hecho un trabajo tan bueno que hacía tiempo que no me emocionaba tanto esta saga, tal vez desde el cameo de darth vader que cité antes.
En cuanto a su historia, el protagonista, un sobreviviente del credo mandaloriano, se le encarga el trabajo de atrapar a un objetivo y entregarlo a los vestigios del imperio que quedaron después de la derrota del retorno del jedi y antes de que surgiera la primera orden. Una vez encontrado el objetivo, éste no ni mas ni menos que un bebe de la raza del legendario maestro yoda, un personajillo que se ha hecho viral y que creo que no necesita presentación. Ni que decir tiene que el encanto del pequeñajo es universal, y hasta nuestro aguerrido cazarrecompensas se prenda de el y se niega a entregarlo a los imperiales que a saber que experimentos horribles harían con él, y juntos, recorrerían la galaxia viviendo aventuras y conociendo personajes que a difrencia de la última triología, éstos no tienen el carisma en el culo, aunque tampoco hablaré mucho de ellos para spoilear lo menos posible.
Lo dicho, con ocho capítulos de poco menos de 40 minutos me ha devuelto la fe en la saga, y ojalá para futuros proyectos en pantalla grande cuenten con estos nuevos talentos, y que por fin dejen morir lo viejo (tu el primero pajota abrams), los cameos de viejales, el traje de chewaka con olor a alcanfor y demás paridas, que ese universo ha demostrado con todas la creces que es más que ver la puta estrella de la muerte una y otra vez. Es mas, me han venido recuerdos de aquella vieja historia del samurai que iba acompañado a un bebe, o a las reencarnaciones del dalai lama con ese adorable miniyoda. Genial, fresca y hecha con mimo,mucho mimo.
Y para acabar mención especial al tema musical de la serie... pocas veces algo me da una patada tan fuerte que me manda a los ochenta de nuevo, felicidades.
0 comentarios:
Publicar un comentario