Broken Sword 5 o cómo romper con la ilusión de una saga

La nueva entrega de Broken Sword: la maldición de la serpiente es como encontrarte con viejos conocidos que han cambiado más de lo que esperabas. Les cambia el aspecto, la voz, pero sobretodo en este caso les cambia sorprendentemente la inteligencia. Y para mal.

George Stobbart, siempre tan relistejo y sarcástico hace ahora comentarios sin gracia, tan poco que como mucho te ríes con él un par de veces en las 8-9 horas que dura la aventura. El resto de veces que me he reído ha sido por las situaciones inherentes de cualquier aventura gráfica, pensar en combinaciones absurdas de objetos.

Es toda una decepción que no hayan conseguido la voz de Tomás Rubio para nuestro querido californiano, y es que con este nuevo doblaje sufre un cambio de personalidad para mí casi insoportable, al igual que Nicolle. También es cierto que yo escribo esto habiendo jugado como última entrega aquel extraño juego en 3D para la PS2 y rejugado alguna que otra vez el 1 y el 2. Quizás para quien haya seguido hasta el 4 en la saga esto no sea tan grave.

De todas formas, como decía nos encontramos con un George un poquito tonto. Además de los comentarios obvios, redundantes y completamente innecesarios que podemos escuchar por parte de los dos protagonistas (la frase favorita de Nicolle en esta entrega es "está loco"), tenemos que tragarnos situaciones tales como que tras escuchar un número clave para la apertura de una puerta a nuestro nuevo idiota protagonista se le olvide la combinación apenas pasen 5 segundos. 

Ah, y antes de empezar, esta entrega se financió a través de Kickstarter (con Revolution Software de desarrolladora, como siempre) y se lanzó en dos capítulos por separado, que ahora se venden en conjutno. Yo estaré analizando el capítulo 1 y 2.

Historia

Así pues y con estas nuevas "dotes", esta parejita que no es pareja se enfrentan a una nueva aventura cargada de simbolismos religiosos (y más que eso) en la que viajas entre París, Londres, Cataluña e Irak. En este caso todo gira entorno a un cuadro catalán que parece traer la muerte allá por donde pasa. Se trata de una historia que no nos hará ni fu ni fa en comparación a las dos primeras, pero que intentarán aliviar con la reaparición de viejos amigos. Nos encontraremos una serie de muertes gratuitas que, sin haberte llegado del todo ningún personaje, más bien te dará lo mismo. Salvo en un caso específico, en que recurren a la culpabilidad, pero te hacen entender que hicieras lo que hicieses el resultado habría sido el mismo... Y vuelves a pensar que ha sido otro intento insulso por parte del guionista, por lo que te vuelve a dar igual.

El final resulta desconcertante y preocupante. Al que añaden un elemento de fan service total, no vaya a ser que todo nos haya parecido penoso, hay que aligerar la carga.

Puzzles

Reencuentro con un viejo enemigo.

Los puzles no son la gran cosa. Suelen ser fáciles y obvios salvo en algunos casos. Además de las cabras, abundan los cables, no se sabe por qué, hasta el punto de que acabas acudiendo a pistas por hastío. Lo mismo con algún que otro acertijo al cuál le encontré poco sentido y no conseguían que fuera nada motivante. Ello obviamente causado por una historia mediocre en comparación (otra vez) con las pasadas entregas. De hecho hasta en algún punto acuden a un "puzzle" en el que debes maquillarte en el espejo de Barbie... y con un fin mucho más vomitivo.

Gráficos

La conversión de los personajes a 3D en un escenario clásico es para mí, sin duda, una decisión nefasta. Los escenarios siguen siendo tan cuidados como siempre, ahí no hay queja. Sin embargo los protagonistas afean visiblemente al convertirse en 3D (y eso que nunca fueron muy guapos). Aunque eso es solo un detalle, lo preocupante es e efecto que provocan en la acción. Si antes conseguían una acción interesante y fluida con algunos movimientos o animaciones en 2D, ahora toda acción es lenta, aburrida, carente de tensión. Es imposible meterte en el papel con esos movimientos torpes en 3D. Sin contar alguna que otra estupidez que sucede entre medias. Como que a mitad de una supuesta escena de máxima tensión recojan una pintura directamente de su marco de la pared. Eso lo veréis en la cinemática introducctoria. A mí ya nada de lo que sucedía me importaba, en lo único que podía pensar ya era en cómo eso podía ser posible.

Traducción

De la traducción tampoco esperéis gran cosa. No controlan demasiado bien los pronombres ni el léxico. Tampoco parecen saber que 2:30 pm se refiere a la tarde. También te sorprenden con un par de tacos por parte de los protagonistas, al comienzo de la aventura. Impropio de ellos, tanto que no vuelve a suceder... Con todo ello los dobladores no hacen un mal trabajo pese a repetir alguna estupidez a causa de ese problema. Puede parecer que hacen una interpretación pésima a veces, pero os aseguro que es por ese modelado en 3D totalmente impersonal. Solo en algún caso específico sí me parece que el doblador no anda fino y es en el de Stobbart. Quizás sea por escuchar tanto una voz que veo ajena a su personaje. Sin embargo, resulta que me da la impresión de que habla con una voluntad de superioridad a casi todo ser viviente. Es algo que me cuesta soportar.

P.D. No, cuando van a cataluña los personajes no tienen ni acento ni hablan catalán, exceptuando una única frase. 

Música

La música no es algo que haya sobresalido nunca en esta saga. No como elemento separado por lo menos, solo funciona bien como ambientación. En este caso también va a peor. No contribuye tampoco a la emoción o tensión como en anteriores entregas y cuenta con melodías horribles para alguna que otra situación (¿qué narices pasa con esa cucaracha?). Por si fuera poco la canción... ¿principal? del juego, una que puedes escuchar en más de una canción y varias veces al completo, se trata de un tema pop de los 70 (???). Sobra decir que no encaja en esta aventura por mucho que lo intenten.

Nicolle

En esta entrega Nicolle está casi siempre pegada a tu lado y sin embargo es en muy contadas y breves ocasiones cuando la puedes controlar. En un par de ellas salvas la situación usando una... fregona. Sí, una fregona que lleva en el bolsillo, nunca se sabe cuando una periodista puede necesitar una (pero de su cámara ni flowers, ¿eh?). Ah, sí, se pasa casi toda la aventura con un chicle rosa pegado en su pase de prensa. En fin. A buen entendedor...

Conclusión

Si eres un fan de la saga ni te acerques, a no ser que tengas mucha morriña. Si eres nuevo en esto de las aventuras gráficas no es tan mal comienzo. Es sencilla, tiene pistas y es un paseo más o menos entretenido. Si la consigues barata (como ahora que está en el Weekly Bundle) pues mucho mejor.

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