jueves, 12 de septiembre de 2019

Cristal oscuro, sorprendente ayer, alucinante hoy.


Todo el mundo conoce los muppets, bueno, todos salvo si eres un millenial cuya infancia lo único que han visto ha sido la mierda esa del omnitrix...ais, se nota que me hago viejo gruñon al meterle tanta caña a esos jovenzuelos...demasiado tienen los pobres por vivir en una era tan comercial y tan falta de creatividad en donde los educan como borregos...solo hay que ver sus libritos de texto, señor, ni los cuadernillos que me daban para repasar en verano eran tan delgados...despotismo ilustrado señores, cuanto menos culto sea el pueblo, mas manipulable...y bueno, solo hay que darse una vueltecita por twitter para ver el resultado... Y como nadie puede elegir en la época en que se nace, mejor dejar el tema.

Como decía antes de mis desvaríos, las marionetas de jim henson han visto crecer generaciones enteras, desde barrio sesamo, pasando por los muppets, fraggle rock, dinosaurios, etc, haciéndose en ocasiones iconos de la cultura pop como la rana gustavo (kermit) o mrs peggy, pero si una obra se desmarcó en la compañía del célebre titiritero fue sin duda cristal oscuro, una película ochentera que fue mas allá, con un argumento alejado de la comedia y una trama mucho mas oscura y adulta, y si, también tenemos dentro del laberinto con el magistral david bowie mostrando sus dotes interpretativas en un papel que le venía como anillo al dedo, pero a diferencia de ésta, en la película que nos ocupa no intervenían humanos, todos eran marionetas.

El universo creado en ésta película era fascinante, un mundo alienígena en donde todas las criaturas eran un derroche de imaginacion. Sobre el argumento no quiero ir mas allá de la sinopsis, una raza de tiranos controlan el planeta gracias a un enigmático cristal corrompido, y nuestros protagonistas, últimos supervivientes de una raza extinta por dichos tiranos tienen la misión de salvar al mundo de ellos completando el cristal con un fragmento que tienen en su poder tal como dicta una antigua profecía antes de la conjunción de los tres soles. 

Por supuesto el argumento de la película es mucho más intrincado, incluso tiene un giro al final que pocos se esperan. Hay que decir que hay pocos personajes en esta película, pero la realización de éstos ya denotaba una maestría fuera de toda duda tanto en diseño como en su manejo. Sin duda una película que si bien carece de toda técnica moderna de cgi, se deja ver con gran satisfacción, eso si, recomiendo verla en versión original, el doblaje al castellano es horrible, sobre todo la voz del protagonista que esta en un espectro entre el emporrado y el medio dormido.

Décadas pasaron, y esa película se fue diluyendo en la memoria de los más veteranos, pero aquí llega netflix con la nostalgia como bandera, trayendo cristal oscuro, la era de la resistencia, y...ay papu, la que se nos ha venido encima...

Me encuantan las precuelas, puede parecer extraño porque en una precuela ya se sabe como va a acabar todo tarde o temprano, pero no se, siempre me han fascinado las miradas al pasado de los personajes y el como llegaron a esa situación. Lo malo de las precuelas, es que la mayoría de veces no están bien cuidadas, no conectan bien con la saga principal, hay incongruencias por todos lados... si quieren un buen ejemplo, ahí tienen la segunda triología de star wars...los ocho últimos minutos de rouge one les da mil vueltas, o si quieren otro ejemplo todavía más sangrante, ahí tienen el hobbit, todo un auténtico desastre. En cambio, cristal oscuro la era de la resistencia sin duda es la precuela que mejor casa con la película original, de hecho, recomiendo ver la película antes que la serie ya que ha sido diseñada para verse de ésta manera, dando explicación de muchas cosas que quedaron como flecos sueltos en el metraje original. 

Si ya sorprende por su calidad de precuela, en donde en realidad brilla la serie es en su argumento...señor, se pone a ver uno cualqueira de sus 10 capítulos de 50 minutos, y al rato te olvidas de que estás viendo una película de marionetas y lo asocias más a una serie con una trama que no tiene nada que envidiar a juego de tronos...y viendo como ésta última declino al final diría que incluso la supera en algunos aspectos.  Aqui no solo van a ver la típica aventura como un objetivo como en la película, van a encontrar tramas políticas, traiciones, escenas de una crueldad que no te esperas, y un dramatismo bastante intenso...nada mal para unos muñecos de poliespan. 

Técnicamente sigue sorprendiendo, por la fidelidad de las merionetas que son prácticamente iguales a la película original, algo meritorio teniendo en cuenta la cantidad de años que las separan, y aunque ya se han incluido téncinas de cgi, no se abusan de ellas y están magistralmente integradas.

Ni que decir tiene que ya están perdiendo el culo por verla, sin duda la mejor serie que he visto en todo el año y que seguramente se llevará el premio a finales de año en los kabuki awards.

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