martes, 13 de febrero de 2018

Citroanálisis de Mercenaries Saga 2


A comienzos de año vi en VX la noticia de que la saga de móviles y 3DS conocida como Mercenaries Saga iba a dar el salto a Switch. Siendo poseedor de una New2DS y costando 5€ el juego decidí jugarlo. No me extenderé mucho porque no hay demasiado que escribir sobre el juego.

A primera vista el juego recuerda mucho a Tactics Ogre y a Final Fantasy Tactics. No es una referencia oculta, pues es obvio que aspiran a cubrir ese nicho abandonado por Square-Enix hace tanto tiempo. El juego recrea la mayoría de sus mecánicas y las simplifica un poco para que sea fácilmente manejable desde un móvil o simplemente para casualizarlo un poco y que llegue a más público.


Lo que funciona:

  • Estética, similar a los diseños de Akihiko Yoshida (FFT, Tactics Ogre, Vagrant Story, FF12...). Son diseños bastante normales, muy bonitos y bastante efectivos, aunque esto siempre será subjetivo.
  • Sistema de clases, pues gusta jugar con distintos personajes con sus progresiones propias. Así cada personaje tiene su propia utilidad en lugar de ser todos más de lo mismo.
  • La historia, que para estos juegos está bien. Bastante predecible, eso sí. Mucho cliché, pero hace su función de llevarnos de una pelea a otra entendiendo por qué toca pelear en cada momento.
  • Rejugabilidad, el juego está diseñado para volver a jugarlo una y otra vez, pues no es demasiado largo pero tiene modo NG+.

Lo que no funciona: 

  • Sistema de clases. ¿No lo había puesto como algo bueno? Pues sí, pero aquí también es malo porque está mal implementado. Cada personaje tiene 5 clases más 2 especiales que requieren un objeto. El problema es que puedes tener todas las habilidades de todas las clases y usarlas a la vez. No te obliga a seleccionar las habilidades de una u otra, por lo que haber elegido una clase no significa absolutamente nada. Es como si te dan a elegir entre dulce de leche y chocolate pero llevarte las dos cosas elijas lo que elijas. Es decir, vuelve inútil la elección y no, no es comparable a tener todas las clases en FFT porque ahí tenías que elegir 2 (principal y subclase).
  • Las habilidades, pese a que cada clase tiene sus propias habilidades, la mayoría son poco menos que inútiles porque no están bien diseñadas. A medida que las subes, aumentan el maná que piden, por lo que si las subes mucho, terminas no pudiendo usarlas y si no las subes, terminan no haciendo daño. Algunas piden mucho maná incluso a niveles bajos, por lo que no las puedes usar casi nunca. Otras son prácticamente inútiles a cualquier nivel, como las que hacen daño y causan un estado alterado, pues además de pedir maná, reduce el daño. Es decir, haces solo un 10-15% del daño a cambio de causar un efecto alterado (que no es seguro) y que encima no servirá demasiado porque antes de que le afecte, le matarás con otro de tus personajes. ¿Quién va a elegir hacer 20 puntos de daño cuando puede hacer 130 de un golpe y terminar con el enemigo o dejarle con poca vida para que otro lo remate?
  • Mecánicas desconocidas, porque para poder dominar un sistema de juego hay que conocerlo y así poder explotarlo. Lamentablemente es un juego fácil, por lo que tampoco hace falta. Basta con llevar un curandero atrás, armas más o menos actualizadas y usar los ataques básicos o las habilidades que aumentan un poco el daño a cambio de algo de maná. A diferencia de otros ataques que aumentan mucho el daño a costa de funcionar la mitad de las veces o cosas así, esos sí son fiables y terminan siendo los únicos que usas.
  • Sistema elemental, a consecuencia de lo anterior, he terminado el juego sin saber qué elementos son débiles o fuertes contra los enemigos. Cada vez que lanzaba un hechizo tenía que probar con todos los elementos para saber cuál le hacía más daño, ya que lo típico de fuego-agua y tierra-viento no se aplica aquí. Puedes atacar con agua a un enemigo de fuego y hacerle menos daño que con tierra o viento. Además, parece que cada enemigo es un mundo, por lo que tienes que molestarte en eso cada vez que atacas con la maga.
  • Información inútil, ya que al poner el cursor sobre un enemigo te viene la tabla de estadísticas, mostrando su vida, su fuerza, su defensa, etc. El problema es que todos esos datos vienen ocultos porque usan la pantalla de datos de tus personajes. ¿Para qué sirve? Pues para nada. Ocupar pantalla y ya está. Podrían haber dejado algo más estético y funcional mostrando solo su vida y su maná, que eso sí lo muestra o haber mostrado los datos, que tampoco les costaba nada.
  • El sistema de turnos, siguiendo el sistema tradicional de primero ataca un bando y luego el otro, las clases pierden aún más su funcionalidad al no influir la velocidad de cada personaje más allá de mover una casilla más que otros. Le quita toda la emoción a este juego porque con ir con tus tropas juntas, vas a arrasar con los enemigos antes de que te puedan atacar.
  • Creación de objetos,  pues el juego te permite unir dos objetos mágicos para combinar sus propiedades mágicas en uno solo. Al final el bono es tan ridículo que no sirven porque en la próxima pelea ya te aparece un nuevo arma que comprar que la va a superar con creces.
  • Objetos especiales, y me refiero a los que permiten usar las clases especiales. Esos se crean con piezas de puzles que se encuentran en los cofres de las peleas del modo historia (hay peleas libres para subir a tus personajes si te quedas corto, que lo dudo). Al final hay un puñado de piezas que son un coñazo de conseguir porque tienes que dejar a algún enemigo con vida pegándote mientras envías a un personaje a por el cofre lejano. No es que se vuelva difícil, porque tu curandero te puede curar siempre y mantener con vida por toda la eternidad, pero requiere hacer un par de turnos más que se hacen tediosos y sin ellas, no mejoras las clases, que además no las puedes mejorar todas salvo que se me escapase alguna. Tal vez en una segunda/tercera vuelta puedas tenerlo todo, aunque no sé si las piezas que cogiste seguirán estando en la segunda vuelta.
 Como veis, lo que no funciona es mucho más largo que lo que funciona, pero se deja jugar pese a darte esa sensación de estar mal diseñado en tantos aspectos.

Conclusión:

Por 5€ está bien y da para muchas horas. El juego falla en muchas cosas, casi todas las importantes, y deben mejorarlas. No sé si las habrán corregido en su tercera parte que cuesta 6€, pero lo dudo bastante. ¿Lo recomiendo? Por ese precio sí, la verdad. Os calmará las ganas de un nuevo FFT o similar, pero no es algo que vaya a pasar a la historia en ningún aspecto.

P.D.: Os engañé. Al final ha salido un tocho hablando solo de las cosas malas. 😝

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